¡Aún vive
Con el ánimo de encontrar alguna tesis sobre
Por qué no es fácil abrir el pensamiento literario?
El tema no es fácil por el lastre academicista que aplicado a alguna poesía de hoy, no logra vencer los prejuicios preceptivistas con moral católica que ya hicieron carrera así las vanguardias -que nacen careciendo de peso para neutralizar la discriminación seudointelectual- surjan para dejar pasar los cambios sociales que traen nuevos lenguajes, nuevas palabras, nuevos sentires y emociones.
Quién tiene la razón?
La respuesta puede encontrarse -en como dice una amiga- el “criollismo permanente” que muchos no superan y por consiguiente desconocen el americanismo . Y, para sorpresa de unos y otros cave anotar que la más seria Poesía Ingenua la escribieron los “letrados” en la medida del Soneto desde hace dos siglos.
Un ejemplo de la conducta conservadora que impera en Colombia, es la innegable y respetable frecuencia de escuchar poesía peninsular bien interpretada, por ejemplo y a propósito de los 75 años del crimen contra García Lorca; pero quien no es gitano y la monta en declamación gitana, la altera y destruye
conocer su vida, su época, su discutible posición política reflejada tenuemente en su poesía; también frecuentemente mencionan como modelo a Rubén Daría, y así continuaría enumerando a otros mal traídos a cuento con mucha frecuencia, sembrando duda en si eso es lo válido o si, a más de eso, se debe reconocer la evolución del idioma, de la forma y de la sociedad que lo engendra; por eso creo que toda la ligereza explica por qué Colombia tiene fama de contar con muchos poetas, pero en gran parte –en especial los mayores- sin evolucionar a la par con la sociedad que los produce. En veces se siente el perfume del siglo XVIII, o el fingido desmayo por José Asunción Silva, o la exclamación: Oh! Rimbau….Oh! Bodelaire….!. Son los mismos mentores que ignoran el valor de poetas ampliamente reconocidos como Juan Manuel Roca y detestan los cambios del Nadaismo…. Menos mal que las generaciones emergentes abren puertas y ventanas para asomar su palabra ingenua, sincera, sin academia, impregnada del sabor de las etnias y comunidades como la afro-colombiana que además le introdujo el golpe del tambor.
Por siglos y seguramente con razón, la poesía que podemos llamar hoy “ingenua”, se clasificó como “costumbrista” extendiendo el apelativo a textos narrativos. Pero lo más importante está en recapacitar en si ese acto bautismal, seudo-despreciativo, obedece al prejuicio de conquistados, todavía sintiéndose “criollos” aculturizados, sin valorar lo terrígeno americano mezcla de la raza y la cultura extranjera, sin memoria de lo que aportó el continente a Europa, de quien, más bien, recibió pocas cosas positivas siendo victimarios de nuestras culturas y desconociendo los avances científicos en botánica y astronomía, arrodillándolos ante la imposición católica que además, se convirtió en fuente de producción
y difusión de la expresión Colonial, Libertaria y hasta Republicana. Recordemos que las primeras imprentas jesuíticas solamente tenían permiso para editar oraciones, presión castrante del pensamiento por muchos años, tanto que el ingenio, lo que hoy popularmente llamamos “malicia indígena” poco se reconoce como propia de de la clase culta y la dejan como característica de nuestra idiosincrasia popular especialmente en el interior del país y pasa como parte de la distracción del atraso. Sin embargo,
Para confirmar el prejuicio, basta con reparar en cómo sacralizaron los “criollos” la cultura española, para no sentirse indios, nativos, negros, y demás clases esclavizadas. Hoy cuando la globalización –por la razón y la fuerza- abre con dificultad las mentes endurecidas para que asimilen la rapidez evolutiva, tenemos que aceptar que esa diferencia de clase social (todavía políticamente vigente) dejó obras maestras pertenecientes a España y que, cuando los nativos escribieron en Castellano, le dieron un vuelco a lo tradicional del momento creando en las artes el mestizaje bruñido en los altares y en la palabra sus leyendas; según los frailes, los americanos ya eran poetas cuando los invadieron, como lo podemos constatar
–aún hoy- en sus narrativas; por eso los tradujeron y se apropiaron de sus ideas en los sonetos que difundieron afirmando que –por ejemplo- eran Muiscas o Mayas cuando ellos, los nativos, no conocían esa cultura literaria; solamente eran poetas intuitivos; los religiosos-escritores solamente trataron de aplicar el alfabeto fonético Castellano a las formas –casi todas- guturales de la fonética americana .
Otro punto que se debe mirar es
Dice el Manuel de Literatura Colombiana, hablando al respecto que: “ El proceso literario colombiano no es una dinámica aislada sino continental, donde los géneros literarios marchan como un frente común en busca de la expresión mestiza que será totalmente real en los años de
Entre unos y otros momentos, pasó la lucha libertaria independentista durante la cual desató Simón Bolívar toda su capacidad poética, espontánea, hasta llegar a la expresión erótica dedicada a Manuelita.
fruto de la libertad de enseñanza que su maestro ejerció. No sobra advertir que jamás fue ingenuo pero sí espontáneo, temático y libre; la suya es, principalmente, literatura política y amatoria:
En las cartas a Manuela -ratificadas como auténticas- la introducción y la despedida, denotan su estado animo; algunas tienen figuras literarias por ejemplo:
“Te pido con el consejo de mis pensamientos, que batallan con el ardor de mi corazón, que te quedes ahí.....”
“.Mi corazón ve con tristeza el horrible futuro de una patria que sucumbe ante la mezquindad”
.“como ejemplo soberbio de la belleza, imponiéndose majestuosa sobre los Andes”
....”mientras yo recojo orgulloso para mi corazón el estandarte de tu arrojo....”
.“se me ha multiplicado el sentimiento de todos los encantos de tu alma y de tu corazón divino, de ese corazón sin modelo...”
...“puesto que nos arrancamos el lama que nos da la existencia, dándonos el placer de vivir...”
“Delirio sobre el Chimborazo” que comienza con la figura: “Yo venía con el manto de Iris, desde donde paga su tributo el caudaloso Orinoco al Dios de las aguas....”Continúa incluyendo las siguientes figuras, por demás esencialmente simbólicas, como lo es todo el texto delirante:
*...Ninguna planta humana había hollado la corona diamantina que siguieron las manos de
*...la tierra se ha allanado a los pies de Colombia, y el tiempo no ha podido detener la marcha de
*...Belona ha sido humillada por el resplandor de Iris, ¿y no podré yo trepar sobre los cabellos canosos del gigante de la tierra?
Comprendo y reafirmo: Bolívar era culto y tenía elaborado el idioma español; le fluía la poesía, no la escribió intencionalmente como un poema, solamente se expresó sincera y sencillamente hasta el punto ingenuo de comunicar su sentir llanamente, quedando registrado en sus documentos y cartas de amor. Lo mismo sucedió con algunos de las generaciones posteriores catalogados como Poetas Festivos, repito, como una forma de llamar al ingenuismo y digo esto porque si me refiero a las artes en general, concretamente a la pintura, está establecido que los movimientos renuevan y son hitos revolucionarios como sucedió en Europa con os movimientos Dada y Naif que “se reconoce, acepta y valora como expresión ingenua que desarrolla solo un tema en su obra, no tiene compromiso académico solo con su identidad individual de la vivencia, como ocurre también con los niños y los pueblos primitivos; es una espontaneidad inconsciente que no diferencia entre “el ser” y su “trasunto” “, según dice el Diccionario del Arte Actual, de Karin Thomas. Entonces, por qué en
en del colegio en el siglo pasado?....A caso, silenciosamente están creando nuevos enfoques, nuevas definiciones, nuevas normas del hoy literario, que mantienen ocultas y pronto las dejarán fluir?
Insistiendo, observo cómo en la poesía, el término “ingenua”, coincide con el significado de “popular” o de “festiva”. En el fondo, comparten las mismas características: sin cálculo, sin vanidad, espontánea, sin interés personal….Solo hay que tener en cuenta que, cuando en ella cabe la “improvisación” se corre el riesgo de que entre la intencionalidad entre el gracejo, el juego de palabras, el doble sentido, el humor y la clara intensión de alabar o denigrar el objeto poético, que en varios y frecuentes casos colombianos lleva pincelada político-partidista usando la sátira, como es fácil comprobar en los repentistas de
* Poesía Ingenua : Popular , Festiva, Espontánea:
“Habrá fiesta en Duitama/ donde canta el bababuy / y en babo, hasta mi mamá/ ha de decir uy! uy! uy!.” (bababuy= pajarito casero / babo= del común)
*De lo que llaman “emotividad elevada” dentro del concepto de “Poesía Ingenua”
en especial referente a anécdotas chispeantes , transcribo la primera estrofa de “Elegía íntima” dedicada a Jorge Pombo en su funeral:
“Aquí estas ya, sobre el tremendo puente / que todos hemos de cruzar un día; / cuatro tablas apenas: se diría / que es poco espacio para tanta gente”
Ejemplo de improvisación de Tomas Carrasquilla, más cercana al concepto menos difundido de“Poesía Intuitiva”, es decir, aquella que no solo bromea sino en sentido de broma deja salir el sentimiento y/o la critica personal: “Blanca como bogotana / leve como muselina / no puede haber vara humana / que te mida Josefina!.
Ejemplo de Poesía Satírica, muchas veces con traza política partidista, referente, ésta, a Rafael Núñez: “Es la risa del notario / una risa de alegría / pero de estilo tan vario, / que si no hubiera honorario / muy poco se “notaría””.
Al entrarnos en ese mismo siglo, es importante recordar a José Joaquín Casas llamado “el señor de la palabra bucólica” por su sensibilidad para con la naturaleza en el paisaje, lo que permite homologar los términos: bucólico y costumbrista, así como también puede hacerse con el concepto de popular; dice Casas: “Se van las tardes del azul verano,/ se van con él las raudas golondrinas,/ se van las horas del bullicio ufano,/ de alegre sol y diáfanas neblinas…”
En ese rubro “Popular”, entró también el poeta contemporáneo del anterior, Julio Flórez de quien el Manual de Literatura colombiana anota: “se sostiene que se inscribe en un sentimentalismo fácil, inculto y de inspiración espontánea. Se anota además, que su obra ha naufragado por completo. Le reprochan su populismo y su versificación”. Cabe anotar que frente a este simplismo, Rafael Maya y Rufino José Cuervo, elogian la basta producción.
Me reafirmo con algunos ejemplos de lo que está catalogado y valorado como Poesía Ingenua, cito ejemplos de:
Poesía costumbrista, es decir que plasma la cotidianidad con ingenuidad: “Comentar del policía / la risa, sería un desquicio, / porque él, de noche y día, / le vive riendo” al servicio” . (referente: empleadas del servicio doméstico)
Poesía ingenua humorística (chiste). Segunda estrofa del soneto “En la tumba de un usurero”: Tampoco vengo a orar, porque la usura / poca piedad la inspira al sentimiento, / tú lo sabes muy bien, el mil por ciento / mata en el alma la plegaria pura”
Poesía festiva con pincelada partidista, llamada “Calambur”: Federico Martínez Rivas, escribió: “Que sea de ruana o de leva, / no importa mucho el equipo, / yo lo que quiero es un “tipo” / que resista bien la “prueba”.
Otro considerando me tienta. En esa seudo-descalificación de lo popular, festivo y/o ingenuo está presente la represión política en Colombia que siempre trata de disminuir e invisivilizar lo que se le opone o quien se le opone...La duda me nace porque entre los poetas con ideología definida y no tradicional, y con capacidad ciudadana de exigencia de justicia, muchos fueron censurados y hasta perseguidos por el gobierno de turno, lo que me lleva a deducir la extensión del miedo entre quienes llegaran a ponderarlos, peor aún entre quienes repitieran sus versos; sin embargo, reconozco el valor de la prensa que los reprodujo dentro de las campañas partidistas desde finales del siglo XIX complementados y/o ilustrados con caricaturas. De poesía popular-política-americana- no académica o formal, cito algunos ejemplos:
“Memoria sobre el cultivo del maíz en Antioquia”: “Vestidos todos de calzón de manta/ y de camisa de coleta cruda/ aquél a la rodilla, ésta a los codos,/ dejan sus formas de titán desnudas…” (Gregorio Gutiérrez Gonzáles)
“A Rabel Núñez (Traidor)”: “Me voy al infierno yo! Con vos triste y compungida/ Núñez llamó a Satanás;/ y éste le dijo: Por mi vida/ que a las puertas enseguida/ le pongan diez trancas más.!(Manuel Uribe Vásquez)
“El Indio”: Hundida hasta las cejas la corrosca; / ruana listada, de algodón; montera;/ calzón de manta; abierta la pechera/ de lienzo crudo; la epidermis hosca…” (Julio De Francisco)
“Los filibusteros”: “Venid, hambrientos pájaros, a entretejer con crímenes/ el nido para el águila que precediendo vas;…” (Rafael Pombo.- Referente, la venta de Panamá)
También es de anotar que entrando
esos juicios el concepto de “narrativa poética” no se había conformado; la separación era: Prosa o Verso. Así que, muchas generaciones “educadas” en colegios confesionales u oficiales, obedeciendo al mismo programa académico y exigiendo los mismos textos, arrasó con el orgullo nacionalista avasallando hasta
Debemos cambiar.
Tan fuerte es el equívoco cultural que aún hoy muchos sienten complejo de “sub-desarrollado”, pensando que solo países europeos o Estados Unidos, tienen buenos autores o hay que vivir allí para entrar en la lista de los elegidos como en verdad sucede. Pero están ciegos ante la nueva conquista económico-ideológica, principalmente de España con la banca y el comercio, sin considerar el valor de la publicidad y el interés de las multinacionales que orientan a los pueblos con la selección de lo que deben conocer tras la oferta de concursos y contratos escondidos en la manida expresión del mercedo: “eso no se vende”. Necesitamos cerrar la tenaza del vacío editorial para enfrentar la nueva conquista!. Fernando Ayala Poveda, crítico superado, en su Manuel de Literatura opina: “Los críticos que desprecian el tesoro cultural de su pueblo, viven en las torres de su propia oscuridad.
Por eso creo en el concepto de
Vuelvo a
Retomo mi reflexión y continúo el análisis entendiendo que el ingenuismo es una forma de ser regida por la espontaneidad, la sinceridad, lo imprevisto y lo no ceñido a la academia, que permite leer material poético de manera poco convencional, mas bien instintiva como lo son las emociones que la construyen; por eso me detengo casi en donde comencé: en la autenticidad de sentimientos en la poesía escrita por los nativos y entro a valorar la sencillez y la impregnación en su sabiduría.
Del poeta wayu, cuyo nombre en español es Migel Angel López que usa por seudónimo para recordar y enfatizar la cultura en que se formó el de Vitorio Apüshana. Dice; “Yo nací en una tierra luminosa./ Yo vivo entre luces, aún en las noches./ Yo soy la luz de un sueño antepasado./ Busco en el brillo de las aguas mi sed. / Yo soy la vida hoy…”
Tomo las palabras de la poeta Jenny Muruy Andoque (Yiche), cuando dice: “Mi voz no es solo mía, De mi gente, la palabra/ que viene renaciendo, yo soy la portavoz. Aunque/ joven, mujer, madre, en mí resuena una voz que / viene desde antiguo, palabra que no muere, versos de sal, poemas que se dice”.
Para cerrar mi reflexión reconozco la ingenuidad del lenguaje poético del RAP, cuya lírica no se debe valorar aislada del lenguaje gestual y la expresión del diseño de su ropa, como tampoco podemos evadir el análisis del grafiti, pero en éste el diseño lo separa de lo espontáneo para convertirlo más en actitud intencional de protesta o inconformismo. En Africa, en las Comunas de Medellín, en el barrio Las cruces de Bogota, en el RAP al Parque, en los premios Grami, en cualquier escenario, crearon su propia rima, su propio ritmo casi cardíaco; su propia medida en la lírica, todo con absoluta libertad. Y no solo ellos; este año en el XXVII Encuentro de Mujeres Poetas, en Roldadillo asistieron varias jóvenes con escritura joven y lectura joven; informales como es esta generación contemporánea, ligera, con otra medida de su tiempo interior….con otro sentir del espacio, con otra intuición….Y, pensándolo bien, la mayoría de poetas –hombres o mujeres- obedecen al instinto que en forma de pulsión (sicológicamente hablando), los impele a escribir construyendo poemas para guiarlos por uno de estos dos caminos: academicista o espontáneo de acuerdo con la respetable cultura de cada quien, cada uno tan valido como el otro en la diferencia.
La poesía es la vida, como dice
Solamente alguien sensible valora la belleza de la vida y escribe, crea, un poema obediente a su acto que cura que libera al ser humano de sus tensiones o pulsiones, confirmando el principio sicoanalítico de que “ la persona no está en el tiempo, ella es el tiempo”; y si unimos el tiempo y el espacio en la poesía, con relación al espacio, es necesario acatar otro principio: “existe la co-evolución con el universo que vuelve cada momento más vivo”.
Por consiguiente, deduzco acordemente, que “la naturaleza y el lenguaje se interrelacionan y generan imágenes, que como figuras verbales hablan de un universo”, ante lo cual escribióOctavio Paz: “Contemplar la experiencia en sí, donde ver y entender se conjugan como vivencias, es captar el sentido más allá del significado”, para llegar a entender que el acto de crear hace parte de la curación del ser y que por eso ”el poeta, el filólogo o el científico, une la autotransformación a la transformación del mundo y su posterior representación y que logra el momento de la recuperación del YO y sus objetos transformados cuando integran un conjunto más saludable para la cura personal…es un camino de ilusiones sobre una realidad que retorna a configurarse en la vida personal…”
Por eso, en situaciones de emergencia por la violencia, como es el caso de Colombia, es un aporte urgente motivar la escritura como cura; mientras que cada quien con sus palabras no alcance su liberación para construir la paz interior, no facilitará la grupal y menos la nacional.
Quedaría por considerar la metodología de los talleres de poesía que así como pueden ser un estimulo para la escritura, también pueden ser la imposición de normas y/o conceptos personales del tallerista que pueden desestimular al alumno y truncarle la espontaneidad y la intuición, creándole miedos o modelos.
Para cerrar mi trabajo me detengo en el lector, que como ya advertí, nunca tiene el mismo tiempo y espacio del poeta; pero que sí se identifica más con el sentimiento expresado en la palabra que con la normatividad, haciendo del poema un elemento “popular”, aceptado por muchos y repetido o citado por otros cuantos. Entre los lectores cuento, lógicamente, a los recitadores que a su vez repiten con sus emociones el discurso del poema, sorprendiendo muchas veces al autor como si su poema fuera ajeno.
Entonces:
La critica cuando es fruto de la academia y no del sentir de la valoración de la palabra expresada con los elementos naturales de la comunicación, entra a valorarse según la estética y el lenguaje grupal y/o individual del juez, de acuerdo a su momento de lector, jamás el mismo del autor, que a su vez, tampoco lo vuelve a vivir así reescribiera el poema.
Por consiguiente, la reglación literaria no es más que eso: un conjunto de reglas……Jamás la verdad sobre la valoración de un texto. Es solamente una de las formas de leer la poesía, mientras
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Gracias por leerme; espero sus comentarios para enriquecer estas apreciaciones.
Bibliografía:
La creación como cura.- Fernández Mouján Octavio
Manual de Literatura colombiana.- Ayala Poveda Fernando
eddacavarico@etb.net.com
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